Un implante dental es una pieza en forma de perno o tornillo que se elabora con materiales biocompatibles. Este se inserta en la dentición, específicamente en el espacio que ha dejado un diente caído, con el objetivo de reemplazar la raíz dental faltante.

Por muchas razones, entre ellas el aspecto funcional y la conservación del hueso alveolar. La pérdida de una pieza dental aumenta la carga de trabajo de los dientes adyacentes y elimina la presión masticatoria que mantiene el hueso alveolar. Además, deja un espacio en tu sonrisa y puede hacer que los dientes se desordenen.

No, no es doloroso. Nuestra solución de Implantología Oral en Madrid se lleva a cabo bajo anestesia local. También tenemos la opción de sedación consciente, que alivia los nervios y hace que te sientas tranquilo durante el proceso.

Si presentas síntomas como el sangrado de las encías al cepillarte, sensación de que la corona está floja, dolor duradero en el tiempo y notas que se ha formado un tejido de tonalidad blanca entre el hueso y el implante, es posible que tu cuerpo haya rechazado el tratamiento. Para que estés seguro, consulta de inmediato con el dentista.

La colocación de implantes está contraindicada cuando se padecen patologías dentales como la enfermedad periodontal, hay infección de huesos maxilares, la paciente está gestando (debido a las radiografías necesarias en el proceso), el individuo sea fumador o exista alergia hacia el material de los implantes.

Sí, es totalmente segura. Solo se administra la cantidad necesaria para ti y se monitorean tus signos vitales constantemente.