¿Sabías que la hipersensibilidad dental afecta a una de cada cinco personas?
¿Notas escalofríos en los dientes cuando tomas algo frío o caliente? ¿Te molestan los dientes cuando tomas un helado? En caso de que esto te ocurra, padeces de sensibilidad dental y conviene que conozcas las causas de este padecimiento tan común que afecta a una de cada cinco personas.
La dentina, la parte interna de los dientes, está cubierta por el esmalte, pero a veces este esmalte se desgasta, perdiendo la dentina su protección natural.
Cuando esto ocurre, diversos estímulos térmicos (como el contacto con alimentos muy fríos o muy calientes), químicos (como ingerir alimentos muy ácidos) o táctiles pueden transmitirse a través de la dentina hasta el nervio, causando dolor.
Las 8 principales causas de la sensibilidad dental.
La hipersensibilidad dental se puede tratar. Para ello, te ayudamos a identificar sus posibles causas:
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- Cepillarse los dientes con demasiada fuerza. El cepillado muy enérgico o con cepillos de filamentos muy duros desgasta con el tiempo la capa protectora de los dientes. Por ello, a forma sencilla de evitarlo es cepillarse con menos fuerza o utilizar cepillos de filamentos más suaves.
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- Ingerir alimentos ácidos. Conviene no abusar de alimentos ácidos que pueden contribuir a erosionar el esmalte, como los cítricos, el yogur, la salsa de tomate o algunos refrescos.
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- Rechinar los dientes. Algunas personas frotan los dientes superiores contra los inferiores, sobre todo por las noches durante el sueño. Conviene utilizar una férula de descarga durante el descanso.
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- Enfermedad de las encías (gingivitis). El deterioro de las encías es un problema bastante común que afecta más a las personas que no mantienen una adecuada higiene dental.
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- Tener un exceso de placa dental. El propósito de la limpieza mecánica mediante un cepillo de dientes y con hilo dental es eliminar la placa que se forma después de comer, que puede desgastar el esmalte.
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- Tener una caries. Esta patología tan común es también una de las causas más frecuentes de sensibilidad dental, porque se destruye el esmalte.
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- Algunos tratamientos odontológicos. La cirugía periodontal, la limpieza profesional y, en menor grado, los tratamientos de blanqueamiento pueden provocar sensibilidad dental pasajera.
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- Dientes agrietados. Un diente roto o astillado puede producir un dolor que vaya más allá de la sensibilidad dental. Por lo tanto, conviene que el dentista evalúe el estado del diente y decida el tratamiento más correcto.
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